La única actitud sensata ante la fatalidad es el humor negro, y en ese género esta novela es una obra maestra.
Dejadme que os hable primero del autor. Émile Ajar es, en realidad, el pseudónimo de Romain Gary, el único escritor que ha ganado dos veces el premio Gouncourt, que sólo puede concederse una vez: una en 1956 como Romain Gary, por Las raíces del cielo, y otra en 1975 como Émile Ajar, por esta novela. Gary inventó un personaje para dar cuerpo al autor de La vida ante sí, a la manera del Kaplan de Con la muerte en los talones, y consiguió intrigar a todo el público. Tuvo que hacer que su cuñado apareciese ante al prensa como Émile Ajar para darle una cara al enigmático autor. Romain Gary era ruso y nació en 1914 en Moscú, como Roman Kacew. Valentí Puig, el prologuista de esta edición, lo describe así:
Dejadme que os hable primero del autor. Émile Ajar es, en realidad, el pseudónimo de Romain Gary, el único escritor que ha ganado dos veces el premio Gouncourt, que sólo puede concederse una vez: una en 1956 como Romain Gary, por Las raíces del cielo, y otra en 1975 como Émile Ajar, por esta novela. Gary inventó un personaje para dar cuerpo al autor de La vida ante sí, a la manera del Kaplan de Con la muerte en los talones, y consiguió intrigar a todo el público. Tuvo que hacer que su cuñado apareciese ante al prensa como Émile Ajar para darle una cara al enigmático autor. Romain Gary era ruso y nació en 1914 en Moscú, como Roman Kacew. Valentí Puig, el prologuista de esta edición, lo describe así: